domingo, 5 de abril de 2009

ABSENTA O LA FÉE VERTE


( Por Taty Cascada )

¿Es necesario para inspirarse acercarse peligrosamente a los deslindes mágicos de los alucinógenos?...Yo, no lo creo necesario, prefiero una evasión centrada, contrita a mis cinco sentidos.Quizás, porque adquiero de cada elemento dejos y sincronías,notas pauteadas que me dan armonía al conjunto que intento elaborar. Pero, debo aceptar el hecho de que una evasión absoluta de la realidad, tiene un componente muy atractivo y llamativo,para personas que no requieren de sus cinco sentidos,sino que de coloridos fuertes, voces extrañas, temblores y sudores que les atrapan y los desafían a adentrarse más y más en su juego.

La gran mayoría de los artistas de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, como Hemingway,Picasso,Degás,Baudelaure,Manet,Wilde -que se preguntaba a si mismo- ¿Cúal es la diferencia, entre un vaso de absenta y el ocaso?,usaron y abusaron de su brebaje. No se si Wilde logró responderse a si mismo, o si Van Gogh se atrapó en llanto,después de cortarse un trozo de su oreja,que le obsequío a una prostituta, bajo los influjos de la hechizante bebida. Se sabe que también Picasso pintó varias de sus telas, bajo sus verdosos embrujos.

Como hipnotizada por el tema, me dediqué a capturar información en internet. No se sabe con certeza el origen y nacimiento,pero si, que la receta de tal brebaje, fue descubierta o elaborada por un médico suizo que vivía bajo el alero de un Convento. Las hermanas muy efectivas en elaborar ideas para surtir divisas e ingresos, comenzaron a vender la bebida como "elixir"...Su popularidad creció tanto y en extremo,que las tropas francesas lo usaban como remedio antipirético.

Pero no fue hasta fines del 1860,que se hizo conocido en cabarets y cafés franceses,naciendo la popular "l´heure verte" cronometrada a las cinco p.m...Cada bar bohemio,instalaba en su mesa una fuente de agua con su grifo para los sedientos consumidores.

¿Qué buscaban los escritores,pintores, poetas, en su deleite?...Tuyonas, que es un alucinógeno destilado por el ajenjo o artemisa. Su preparación es todo un ceremonial, se sirve en un vaso de cristal, con una cucharita cóncava,donde se coloca un terrón de azúcar, desde allí se dejaba caer agua para disminuir su intensidad...En el caso de los bohemios artistas y escritores románticos, el brebajs era tomado con el cien por ciento de tuyonas,es decir puro.

Si observamos un vaso, veremos que su composición es sencilla: artemisa, flores de hinojo y anís, la llamada "Santa Trinidad", puede llegar a los 89.9 grados de alcohol,no es un licor porque no contiene azúcar,por lo tanto es una bebida, y su color procede de colorantes asociados o de la clorofila de la artemisa, variará su tonalidad de acuerdo a la cantidad de agua que se le adicione, tendremos "Bleue" o "Blanche", pero el original siempre será "La Fée Verte".

Fueron genios los que la bebieron, pero no creo que su genialidad provenga de un estimulante poderoso,ni de una bebida capaz de vibraciones corporales...Ellos, eran geniales,porque nacieron especiales, les gustaba reunirse en grupos,charlar,aprender de los demás,adquirir más técnicas e intentar hacer lo que otros no habían hecho,es decir transgredir normas,evadir lo cotidiano, transmutar y ser otros.

La absenta quedará como una locura más, como un hecho curioso, que nos adentra más en ese mundo mágico, de los artistas bohemios.

1 comentario:

Gina dijo...

Interesante planteamiento. Creo que el ser humano es curioso por naturaleza y el ser creativo en el caso de artistas, pintores, escritores, los hace quizás más proclives a desear experimentar con sustancias. Hecho tan viejo como la humanidad misma. Ha existido en todos los tiempos, desde la más remota antiguedad. Los chamanes andinos por ejemplo a quienes se les atribuye la capacidad de modificar la realidad o la persepción colectiva por medio de alucinógenos, usaron el llamado San Pedro o el Hayahuasca. Este hecho está presente en los sintoístas Japoneses, casi todas las tribus indígenas de Norte, Centro, y Sur de América, Australia y Nueva Zelanda, la han usado como formas para modificar la conciecia y recibir conocimientos, aparte de buscar experiencias religiosas diversas. Claro que ponen y confieren en hierbas y raices cierta sugestión, de un efecto placebo, caso en los llamados curanderos.

Las Sociedades antiguas usaron drogas enteogénicas para realizar rituales de origen religioso. El uso de anteógenos por los aztecas vienen del Códice Florentino, 12 libros que describen estas drogas. También la llamada tradición Bato las usó. Los Misterios Eleusinos en Grecia, donde se cree usaron el Kykeón como agente psicodélico, existen varias teorías, por supuesto. En El Incanato el uso de la hoja Coca, adormecía al trabajador del campo, como es sabido, para no tener hambre y se usaban muchas hierbas diversas para realizar delicadas operaciones, como las trepanaciones de cráneo.

En el caso de los artistas de todos los tiempos, es un afán experimental para alterar lógicamente sus estados de conciencia, si es posible traspasar y vivir experiencias que los lleven a revelaciones intelectivas y espirituales nuevas, quizás asi intentar crear cosas nuevas y novedosas que recreen su imaginación. Caso de la Generación Beat de escritores y la época Hippie, donde los alucinógenos eran casi una norma.

Saludos desde Barcelona.

Gina.