( Taty Cascada )
Llévame cariño mío, llévame...
Llévame por tu vereda, por tu senda,
por tu camino de guijarros y cerezos.
Me prenderé a tu corazón palpitante,
agazapada, trémula, turbada, desnudada.
Sabes amor mío, que en tus amados brazos,
moriré y renaceré en ese dulce instante.
Llévame amor mío, no vaciles cielo mío,
estremecidas y ardientes gemirán mis carnes.
Mi gozo reprimido y mi alegría airosa,
el tiempo sin locura, sin ti es un desafío.
Mis pensamientos arden en mis sienes,
húmeda, loca, fantasía peligrosa.
Mi aliento se replegará en tus labios ansiados,
vaho de fuegos y sedientos deseos fecundos.
Enajenado estrépito de voces entrecortadas,
cúmulo y reguero de besos enajenados.
Pienso y vivo, en tus sueños profundos,
lenguaje de silencios, palabras ensimismadas.
Llévame a tu sueño más preciado, a tu relajo,
condúceme por tu huella, con tus eternas manos.
Enardecidas mis ganas, como llamas invisibles,
delinearé tu boca ávida, como un sutil bosquejo.
Tus ojos como dos ánforas de olorosos manzanos,
inflamarán mis venas febriles y sensibles.
Llévame cariño mío, llévame a ti...
2 comentarios:
Allí te llevo... un gusto haberte leído. Nos seguimos mutuamente.
Recibe un cordial saludo desde Berlín.
Marisol:
Agradecida por tus palabras, recibe un saludo afectuoso desde mi lejano país...
Tatiana
Publicar un comentario